Los desacuerdos familiares son inevitables, pero no siempre deben convertirse en pleitos judiciales. La mediación familiar ofrece una vía pacífica y ordenada para alcanzar acuerdos que beneficien a todos los involucrados, especialmente cuando hay hijos de por medio.
Pasos de la mediación familiar:
- Solicitud inicial
Uno de los interesados acude al centro de conciliación y presenta su petición. - Convocatoria de la otra parte
El centro contacta a la otra persona para invitarla a participar en el proceso. - Reunión de mediación
Con la guía de un profesional imparcial, cada parte expone su situación y necesidades. - Búsqueda de acuerdos
Se analizan alternativas que puedan ser beneficiosas para ambas partes. - Redacción del acta de conciliación
El acuerdo se plasma en un documento con validez legal.
Ventajas
- Se evita la confrontación innecesaria.
- Es más rápido y económico que un juicio.
- Promueve el respeto y la cooperación.

